Entrevista con Anabel Trujillo, gerente de Rurable
Asumió la gerencia de Rurable en el mes de abril y, en los pocos meses que lleva ejerciendo su cargo, ha tenido oportunidad de tomar el pulso al territorio y a las inquietudes de nuestra la ciudadanía. Ha comprobado que aquí hay muchas ganas, buenas ideas y grandes recursos. Es hora de movilizarlos.
Anabel, ¿de qué modo estás pudiendo escuchar y atender a la ciudadanía del #TerritorioRurable?
Desde que Consellería publicó a finales de abril las bases por las que se regulan las ayudas LEADER, tanto el presidente de Rurable, José Luis Salón, como mi compañera Paqui Penadés y yo misma hemos tenido una agenda muy apretada dedicada a informar a toda la población de esta oportunidad. Hemos tenido actos con todos los formatos posibles: uno principal de la mano de la administración, otros en diversos municipios dedicados en exclusiva a estas ayudas y algunos más en los que nos han invitado a participar, aunque el tema central no fueran estas subvenciones. En todas estas actividades informamos de los requisitos que se exigen, de los proyectos que se priorizan y, en general, de cómo el espíritu de los fondos LEADER se traducen en subvenciones concretas. Y, claro, también escuchamos las inquietudes del empresariado o de personas que están pensando en emprender.
Cuáles son, desde ese punto de vista, los puntos más destacables de las ayudas LEADER.
Lo más importante es saber que se subvencionan fundamentalmente proyectos productivos que generen empleo, ya sea autoempleo o la contratación de otras personas. También es imprescindible tener en cuenta que se priorizan los proyectos realizados por pequeñas y medianas empresas, los que se ubican en núcleos rurales los que tienen como protagonistas a las personas más vulnerables del ámbito rural: los jóvenes y las mujeres. Porque sin jóvenes y sin mujeres el campo se despuebla.
Estas ayudas priorizan los proyectos realizados por pequeñas y medianas empresas, los que se ubican en núcleos rurales y los que tienen como protagonistas a jóvenes y mujeres
Y ¿cómo se convierte una idea en un proyecto subvencionable?
Tener una buena idea es insuficiente a la hora de obtener una subvención: hay que demostrar que se tiene bien desarrollada esa idea de negocio. Se necesita un plan de viabilidad y una completa memoria del proyecto. Hay que estudiar los precios propios, los de la competencia, las ventajas competitivas del negocio propuesto… hay que calcular mes a mes cómo se van a afrontar los compromisos que se adquieran, cómo se van a repercutir los gastos… Y luego todo ello hay que presentarlo según el formato que exige Consellería que, por otra parte, ayuda mucho a ordenar las ideas.
Eso significa un gran trabajo
Nadie ha dicho que emprender sea sencillo. Pero todas esas exigencias que hay que abordar sobre el papel son las que una nueva empresa, por pequeña que sea, va a afrontar en la realidad. Por eso es imprescindible que se haya pensado en todo ello con antelación. Además, nuestras oficinas están abiertas y cualquier persona interesada en montar su proyecto puede venir y le ayudaremos y le orientaremos.
Las exigencias de la convocatoria parecen altas, pero se trata de que una persona que emprende aborde sobre el papel todo aquello a lo que se va a enfrentar en la realidad
Pero eso no será posible antes del 4 de septiembre, cuando se cierra esta convocatoria
A ver, esta primera convocatoria se cierra en unas semanas y, desde luego, solo van a entrar en ella los proyectos que ya estén maduros y bien orientados. Pero se va a abrir una nueva convocatoria en 2019. Según nos han informado desde Consellería será entre los meses de febrero y marzo. Y eso significa que desde ahora hasta ese momento hay poco más de medio año para trabajar ideas, analizarlas, informarse de lo que el mercado requiere, buscar soluciones imaginativas a los posibles problemas…Y no es mucho tiempo, porque cualquier negocio requiere de todos esos pasos previos. E, insisto, aquí estamos nosotras para orientar a las personas que vayan a demandar las ayudas. Les orientaremos y pondremos pegas a sus propuestas para que, a la hora de la verdad, no sea la realidad la que se las ponga.
Las personas que solo tienen una idea y no un proyecto maduro, cuentan con algo más de medio año para trabajar, analizar, informarse y dar forma a su empresa. Y cuentan con nuestra ayuda para ello.
Después de estos meses de trabajo, ¿qué podemos esperar en el territorio de nuestros emprendedores?
Podemos esperar bastante, sinceramente. Los primeros meses nos dedicamos más a hacer tareas informativas en general, pero, desde que se abrió la convocatoria, ha sido una auténtica avalancha de personas a las que hemos atendido personalmente o por teléfono. Estamos comprobando que los proyectos no están maduros para esta primera convocatoria de 2018 pero hay buenas ideas e ilusión por parte de la población y seguro que para la de 2019 habrá buenos proyectos en marcha. Obviamente, tardarán en dar fruto, pero en el campo ya sabemos que para cosechar primero hay que plantar y cuidar.
¿Hay muchas diferencias por ámbitos territoriales?
La verdad es que nos ha sorprendido la demanda que estamos viendo. Asumíamos que, por población y dinamismo, la comarca de Requena-Utiel sería la más activa. Y así está siendo. Pero comprobamos que, a pesar de contar con una población muy inferior, también en la zona del Valle de Ayora (en la propia Ayora, en Cortes de Pallás, etc) hay mucho interés por emprender pequeños negocios y hay grandes ideas. Y también estamos teniendo buena acogida en la Hoya de Buñol-Chiva ¡Esperamos ver cómo se convierten en realidad!
Todos lo esperamos. Porque lo que está en juego es muy importante: la revitalización de nuestro territorio.